Ya hemos visto cómo la energía solar es más que los paneles solares fijos en el techo de casa, sino que nos pueden acompañar cuando vamos de acampada con paneles solares portátiles y mochilas solares, o cuando nos hemos quedado en casa sin electricidad y necesitamos cocinar, sabemos que podemos contar con cocinas solares.
Aun así, las aplicaciones de esta tecnología no terminan aquí, sino que ahora revisaremos un objeto que utilizamos comúnmente, sobre todo si estamos en época escolar o hemos decidió salir de mochilero a conocer el mundo, seguramente nos será muy útil! Hablamos de las mochilas solares.
¿Qué son las mochilas solares o mochilas con paneles solares?
Son una adaptación de las típicas mochilas escolares o de excursión, solo que a este tipo de mochila en la parte frontal se le ha integrado al tejido un panel solar, que nos permite realizar la carga de nuestros dispositivos móviles cuando vamos por la calle o montaña o cuando hemos decido sentarnos al sol a disfrutar de un café.
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¿Cómo funcionan las mochilas solares?
El funcionamiento es el siguiente, mientras la mochila esta expuesta a la radiación solar, el panel absorbe estos rayos y con el efecto fotovoltaico, lo transforma en energía permitiendo que en el interior de la mochila podamos cargar nuestro dispositivos móviles, por medio de un cable USB.
El efecto fotovoltaico se genera por que estos paneles solares están confeccionados con silicio que, al estar expuesto al sol, se mueve y este movimiento es el que permite generar la energía solar.
El panel solar que tiene incorporada la mochila tiene el beneficio de ser flexible, impermeable y resistente a los arañazos, ya que estos últimos podrían afectar el rendimiento del panel solar.
Algunas de las mochilas solares, cuentan con una batería integrada lo que significa que, aunque el día no este soleado, nuestra mochila podría igualmente cargar nuestro dispositivo.
Debemos considerar que la capacidad de la batería no es para dispositivos que requieran demasiada energía como los ordenadores, para esto es mejor un powerbank que también tenga la tecnología de cargarse con el sol, para que sigamos aprovechando este recurso.
Dependiendo del modelo y de la batería que tenga integrada, los tiempos de carga pueden ser de 2 a 6 horas para tener la batería completa, todo dependiera del fabricante.
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Estructura de la mochila solar
Lo que se ha tratado en este tipo de productos no es perder funcionalidades que son importantes para cualquiera que lleve mochila, como el antirrobo o que sean impermeables. Sino que le han sumado un beneficio que es el de cargar nuestros dispositivos.
En algunos modelos de este tipo de mochilas los paneles solares que tiene se pueden quitar para así poder utilizarlos para cargar otros dispositivos, lo que sería muy útil en un paseo, por ejemplo.
En cuanto al diseño no son novedosos, pero si tratan de mantener una estética equilibrada entre moda, usabilidad y tecnología.
Algunos de los modelos que hemos podido revisar, no se han quedado solo en utilizar energía renovable, sino que aporte al medio ambiente con tejidos confeccionados con materiales reciclados como el polipropileno obtenido de las botellas de plástico.
En que fijarse al momento de comprar una mochila solar
Una de las primeras cosas a tener en cuenta son las potencias de las placas solares, ya que esto ira en concordancia con la velocidad de carga que nos pueda aportar nuestra mochila.
Otra cosa fundamental es claramente que tenga integrado un USB, y que comprobemos que este nos permite cargar los dispositivos que llevamos con nosotros con mayor frecuencia como móvil, cascos entre otros.
También es importante revisar que el peso de la mochila no se haya aumentado por la incorporación del panel. Tanto el tamaño como la capacidad de la mochila es algo en que nos fijamos siempre, aunque no tenga un panel solar, y como es de costumbre, es necesario determinar para qué la utilizaremos con mayor frecuencia, para definir la capacidad que necesitamos.
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