Los filtros de cerámica utilizan como base la cerámica natural, es una de las formas más antiguas de filtración y aunque no lo creamos este método existe desde 1827, cuando el inventor y alfarero Henry Doulton, lo utilizaba para eliminar la cólera que existía en el agua potable.

Desde esa versión de filtro, las cosas han evolucionado mucho y actualmente, a estos filtros se le llama velas de filtro de cerámica. Los podemos encontrar con forma de vela, de olla (vasija) o de disco, aunque las de tipo vela y olla son los que se utilizan con más frecuencia.

Funcionamiento y limpieza de los filtros de cerámica

Lo que hace la cerámica al filtrar, sigue la misma lógica que tiene la naturaleza para purificar el agua, el agua en los ríos se cuela entre las rocas lo que hace que se purifique, bueno la cerámica en este caso es como la roca.

Esto es posible debido a que al “hornear” la cerámica se forma una malla de poros que tienen una dimensión de medio micrón, es decir equivale a 0.0005 centímetros, por lo tanto, estos poros llegan a ser más pequeños que las bacterias.

En algunos lugares, la forma de utilizar estos filtros es verter el agua en un recipiente superior para que pase por el filtro de cerámica, hacia un recipiente inferior en el que obtendremos el agua filtrada, es decir filtran por gravedad.

Se considera un método versátil ya que puede ir por encima del fregadero, debajo o ser portátil, además los filtros tienen bastante duración ya que si comienzan a presentar obstrucciones se pueden limpiar con un cepillo y agua corriente. Para su limpieza debemos evitar detergentes o abrasivos y tener mucho cuidado en la manipulación del filtro, ya que la cerámica es frágil y se pueden romper.

Como recomendación antes de beber el agua filtrada, hay que limpiar el filtro y luego dejar filtrando agua durante un par de minutos antes de comenzar a beberla.

Composición de los filtros de cerámica

La fabricación de los filtros de cerámica varía, pero podemos encontrar tres tipos bien definidos:

El primero es el “tradicional” que es el uso solo de la cerámica. Este método permite filtrar partículas sólidas, pero no logra eliminar todos los patógenos, ni contaminantes químicos, como arsénico, fluoruro y las aguas muy turbias o con alto porcentaje de hierro.

La segunda es el de “doble acción” o “decolorante” es una vela que tiene un núcleo de carbón activado en forma de granular, lo que permite el filtrado y, además, reducir el cloro y los olores del agua.

Y por último está el de “triple acción” o “esterilizante” esta es una unión de los otros dos tipos mas la acción de un recubrimiento de plata (plata coloidal) que actúa como desinfectante, el resultado de estos tres compuestos juntos es un agua que se puede consumir o almacenar.

Filtro de barro

Este tipo de filtro es parecido al de cerámica, la diferencia es la materia prima, que en este caso como dice el nombre es la arcilla. Brasil es uno de los países en los que mas se utilizan este tipo de filtros.

Suelen estar compuestos de arcilla, plata coloidal y carbón activado, esta combinación permite eliminar turbiedad, parásitos, micoorganismos y metales pesados como el mercurio y el plomo, ambos altamente nocivos para la salud.

Cerámica o arcilla, cuál elegir

Ambos son igual a la hora de realizar la función de filtrado. Además presentan unas características similares y muy llamativas en comparación con los otros tipos de filtros:

• Son muy económicos y dan un servicio muy prolongado
• Son fáciles de mantener
• No requieren de electricidad
• Permiten mantener el agua a una temperatura inferior, refrigeran el agua conservándola a 4 o 5 grados menos que la temperatura ambiente.