Las velas se pueden construir con diferentes materiales pero como hemos revisado en otros artículos, hay algunos de estos materiales que pueden resultar tóxicos, por eso en este articulo te presentamos una tendencia la soja.
La cera utilizada para estas velas de soja se obtiene de un proceso en el que el aceite que se extrae al exprimir las semillas de la soja se vuelve sólido. Por lo tanto es un producto sostenible y biodegradable.
Que el punto de fusión sea bajo; (entre los 40ºC y los 45ºC) permite que los aromas de extractos o de aceites esenciales se dispersen con mayor facilidad, además este punto de fusión permite que duren entre 2 a 3 veces más que una de parafina que tiene un punto de fusión más elevado.
Estas velas de soja no generan CO2 por lo que no contaminan el ambiente en el que estamos, por eso son recomendables para personas sensibles a los olores, aquellas consientes con el medio ambiente. Las velas de soja natural generan menos humo y hollín, se convierten en una elección más segura para personas con alergias o asma.
Además, si eres de las personas que en tu día a día buscas un espacio para la meditación y la relajación este tipo de velas podrían ser una muy buena compañía, ya que son de aromas suaves y su luz es tenue.
Si te interesan estas velas aquí te dejamos algunas de nuestras recomendaciones.
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Historia breve de las velas de soja
Las velas han estado presentes desde la antigüedad (500 a.C.), pero por su origen, en muchos periodos fueron usadas solo por aquellos más adinerados, dejando las antorchas para los menos afortunados.
Hasta la industrialización, las velas se hicieron de sebo, grasa animal, aceite e incluso cera de abeja (que era muy costosa y exclusiva)
A partir de 1850 se comienzan a realizar las primeras ceras de parafina, sus ventajas en aquella época, eran el bajo coste de producción y la falta de olor (imagina cómo olerían las velas de grasas de pescado).
Pero toda etapa tiene un fina y la aparición en 1879 de la bombilla incandescente, dejó de lado a las velas como fuente de luz y dejándolas como un mero elemento decorativo. Su uso despunta otra vez en 1990 para la aromaterapia y decoración.
La cera de soja fue descubierta por Michael Richards en 1996, el cual había fundado una empresa para la fabricación de velas naturales unos años antes.
Comprar cera de soja
La mejor opción para crear tus propias velas de soja es comprar la cera ya en su estado solido, estas son las que ya hemos probado y son realmente fáciles de manipular, dan buen rendimiento y es soja natural.
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Obtener cera de soja
La cera de soja se obtiene convirtiendo el aceite de soja en grasa sólida. Para ello se realiza un proceso de hidrogenado por el cual los aceites se convierten en materia sólida al reaccionar con el hidrógeno a temperatura elevada, convirtiendo los ácidos grasos insaturados a saturados. De este modo la cera se solidifica a temperatura ambiente.
Este proceso se puede realizar de manera semi-industrial con un par de maquinas bien usadas. Normalmente se usan unos 60 kg de soja para obtener poco más de 10 litros de aceite de soja. Para obtenerlo, lo ideal es usar una prensa extrusora. De este modo también obtendremos 50 kg de soja natural prensada, que presenta muchos beneficios en la alimentación animal, como es su rendimiento y que los animales producen menos metano en su digestión.
Para transformar este aceite en cera, necesitarás una máquina de hidrogenación. La máquina se usa inicialmente para calentar el aceite hasta una temperatura de 140 a 225 °C, después se hidrogena el aceite. Con este proceso se formarán grasas saturadas que ya tienen la consistencia adecuada y es lo que llamamos cera.
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